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Conoce al equipo Bahia H2 Offshore: Tresca Ingeniería

  • Nombre de la empresa: Tresca Ingeniería S. A
  • Nombre del entrevistado: Jose Antonio Blasco Rasero, Director de I+D

¿En qué áreas trabaja Tresca Ingeniería?

Tresca es una empresa de consultoría e ingeniería ubicada en León que tiene experiencia de más de 23 años como ingeniería de la propiedad en labores de permitting, gestión, diseño e implementación de soluciones en numerosos procesos industriales para los más diversos sectores: industria química, farma, vidrio, cemento, oil&gas y, por supuesto, un importante rol en el sector de energía, sistemas de almacenamiento, energías renovables, descarbonización y desarrollo de proyectos de hidrógeno y derivados.

El equipo de I+D+i de Tresca se compone de 8 personas. Es un departamento relativamente grande para el tamaño de la empresa, lo que demuestra la importancia que tiene para nosotros la I+D+i.

¿Cuál es el papel de vuestra empresa en el proyecto Bahia H2 Offshore?

Tresca es responsable del diseño y desarrollo del proceso de producción de amoniaco renovable y su integración en el prototipo. En un principio se descartó la instalación de un reactor de pruebas por los elevados costes asociados y la complejidad de la integración del prototipo completo a falta de muchos aspectos de diseño que esperamos validar en esta fase. Se dejará la implementación del proceso aguas abajo del electrolizador para una siguiente fase del proyecto.

En esta fase se realizará un estudio detallado apoyado en simulaciones dinámicas para definir tanto el layout como la estrategia de control más adecuada, no solo de la planta de amoniaco sino de la relación de esta planta con el resto de las instalaciones, a la vez que se colabora con otros socios como CTC en estudios de I+D para uso de agua de mar para la condensación de amoniaco o el diseño óptimo de los sistemas de almacenamiento.

Además, Tresca es parte del equipo de coordinación del proyecto y junto a Saitec y SICC, estamos implicados en las distintas etapas y aspectos del proyecto.

¿Por qué ser parte de Bahía H2 es valioso para vuestra empresa?

La temática del proyecto encaja perfectamente con la actividad y estrategia de I+D+i de Tresca, cadena de valor innovadora y conocimiento del H2 renovable.

En el proyecto BAHIA H2 OFF-SHORE se producirá hidrógeno renovable mediante electrólisis de agua de mar previamente tratada, simulando condiciones y operativa off-shore y utilizando energía 100% renovable como base para generar materiales descarbonizados en un entorno off-shore en fases posteriores.

Participar en este proyecto impulsa la innovación, la competitividad y la sostenibilidad y permite a Tresca y las empresas del consorcio obtener un valioso conocimiento para identificar soluciones innovadoras y, de alguna manera, adaptarnos eficazmente a los cambios tecnológicos y del mercado.

¿Cómo crees que puede cambiar el proyecto la realidad actual en materia energética y para el transporte marino?

Las plataformas off-shore aprovechan energías renovables como eólica y solar marina que suelen ser más estables y abundantes que en tierra. Al procesar y producir en el mar se reducen costos e impacto ambiental a la vez que se facilita su distribución directa a barcos gracias a su proximidad a rutas marítimas, lo que disminuye el transporte terrestre y las emisiones asociadas.

Por otro lado, en Tresca creemos firmemente que los puertos españoles deben convertirse en facilitadores clave de la transición energética y la transformación económica, especialmente mediante la gestión de moléculas energéticas como el hidrógeno, que impactarán en la movilidad y la industria. España tiene ventajas competitivas como una ubicación estratégica, una red portuaria sólida y empresas internacionalmente competitivas, lo que permite utilizar materias primas, transformarlas y exportarlas con valor añadido.

El futuro energético debe enfocarse en el desarrollo de diversas tecnologías, como el hidrógeno verde y combustibles avanzados sostenibles como el amoniaco, metanol o el metano, dejando que la demanda vaya determinando las necesidades para descarbonizar el transporte marino.

¿Cuáles son los principales retos a los que nos enfrentamos para aprovechar el poder de nuestros océanos y generar un futuro renovable para el sector marítimo?

El sector naval explora combustibles alternativos como el caso del hidrógeno y amoníaco para cumplir con el plan de reducción de emisiones definido por la OMI y las normativas europeas, como el paquete “Fit 55” y FuelEU Maritime, que buscan descarbonizar el transporte marítimo hacia 2050.

La producción y almacenamiento de amoniaco son tecnologías maduras, pero se trata de un proceso químico que no es lo suficiente flexible por la naturaleza errática de las energías renovables.

Nos enfrentamos a varios retos en este proyecto: hacer frente a las perturbaciones en la alimentación de la energía renovable aislada, una decisión de compromiso para diseño óptimo de almacenamiento de energía en conjunto con el diseño de una estrategia de control eficaz y robusta que permita conseguir la flexibilidad operativa necesaria. Sin olvidar que todo esto debe sostenerse sobre una plataforma off-shore, solventando desafíos técnicos e impactos ambientales asociados.

¿Qué podemos hacer entre las distintas partes interesadas para afrontar esos retos y multiplicar el potencial del proyecto Bahía H2?

Tanto el consorcio como el comité directivo está formado por empresas y socios que aportan una destacada experiencia en las diferentes disciplinas y especialidades de las que bebe el proyecto. Desde Tresca vemos fundamental el saber gestionar adecuadamente los recursos y capacidades, fomentando la colaboración y promoviendo la innovación. A lo largo de estos primeros meses se han establecido sinergias muy positivas y se observa una gran aceptación pública y por parte de nuevas empresas privadas y entidades públicas con las que colaboramos en Cantabria.

    Asime

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